Ni por mí, ni por Dios, ni por tu viejo, ni por tu vieja, ni por tus amigos, ni por tu novia, ni por tu novio, ni por tus hijos, ni por tus hermanos. Jurá por vos.

Jurá. Jurá que no estabas nervioso. Jurá que no repetiste las mismas cosas que en los últimos 90 minutos. Jurá que no te aferraste a esa foto de alguien que ya no está. Jurá que no miraste al cielo. Jurá que no se te erizó la piel cuando sonó el himno. Jurá que no miraste mal a algún australiano.

Jurá que no comentaste las jugadas. Jurá que no gritaste con el alma el gol del diez. Jurá que no te abrazaste con tu vieja, con tus amigos, con tu viejo, con un extraño. Jurá que no dijiste "hay que hacer el segundo". 

Jurá que no cantaste que hay que ganar la tercera, jurá que no preparaste el mate en el entretiempo. Jurá que no te late el corazón como le latió a Julián en el segundo gol de la Selección. Jurá que no te llenaste de dudas cuando el rival descontó.

Jurá que no envejeciste con los nervios del final. Jurá que no te tiraste con el Dibu a sacar esa maldita última jugada. Jurá que no gritaste "Vamo Dibu, viejo nomás". Jurá. Jurá que no gritaste cuando el juez pitó el final.

Jurá que no estás ilusionado. Jurá que no festejaste a la noche. Jurá que las semanas no están pasando más rápido. Jurá, jurá hermano. Y sobre todas las cosas, jurá, pero esta vez hacelo por vos. Mirame bien a los ojos y jurá por vos, y decime si este deporte, al que se cansaron de tratar de mancharlo y destruirlo, no te saca una sonrisa. 

Jurá que este deporte no te acompañó en los momentos más tristes de tu vida, en los momentos más felices de tu vida, en los momentos en el cual alguna vez, esos momentos no tuvieron sentido, jurá que oficialistas y opositores no se abrazaron por fútbol.

Jurá que el fútbol, incluso a la persona que menos le gusta, alguna vez, no le robó una sonrisa. ¿Y por qué te hago jurar? justamente por eso, porque en tiempos donde la mierda es más normal de lo normal, y se jura en vano con palabras que no se cumplen y se las lleva el viento, que algo o alguien te robe una sonrisa, es vida que brota y que llena. Y hoy, esta vida, nuestra vida, sonríe y se llena por esa pelota que va completa de la esperanza y las ganas de la gente de un país, que te jura, Selección, te jura que nunca te va a abandonar.